El comandante general del Ejército, Edwin Donayre, negó que haya renunciado al cargo a raíz de la denuncia en su contra por la asignación de 80 mil galones de gasolina durante el 2006, cuyo destino no ha podido justificar.
En ese sentido, reiteró que dejará próximamente la Comandancia General porque termina su gestión de acuerdo a las normas existentes.