Un sismo de magnitud 6,8 sacudió el viernes la zona centro-sur de Chile, cerca de la ciudad de Concepción, sin dejar daños ni heridos.
El temblor hizo colapsar las telecomunicaciones y generó alarma entre la población de la zona, que un año atrás fue conmocionada por un terremoto de gran intensidad que dejó cientos de muertos, acotó Reuters.
«No ha habido reporte de daños significativos ni tampoco de perdidas de vida ni de accidentes que afecten a las personas. Sí se produjo una cierta congestión en el tráfico telefónico celular y algunos cortes menores de luz y agua en el centro de Concepción», dijo el presidente Sebastián Piñera.
El mandatario destacó que igualmente se descartó la posibilidad de un tsunami por el sismo, que se percibió desde la región de Valparaíso, al norte de Santiago, hasta la sureña ciudad de Valdivia.
De acuerdo con el Servicio Geológico de Estados Unidos (USGS por sus siglas en inglés), el sismo de magnitud de 6,8 se produjo a las 17.05 (hora local) a 45 kilómetros al noroeste de Concepción y a una profundidad de 28 kilómetros.
Con el sismo, los pobladores revivieron los temores del devastador terremoto de magnitud 8,8 y posteriores tsunamis que azotaron la misma zona el 27 de febrero del año pasado.
Imágenes de televisión mostraban personas evacuando edificios y tiendas, mientras otros buscaban en medio de los nervios comunicarse con sus familiares.
Las operaciones de la mina de cobre El Teniente de la estatal Codelco, ubicada a unos 80 kilómetros al sur de Santiago, no fueron afectadas por el movimiento telúrico.
Las más importantes operaciones mineras del país, mayor productor mundial de cobre, están localizadas en el norte del país.
El Teniente, que produce más de 400.000 toneladas anuales, es la única gran mina del metal rojo en el sur del país.
De igual forma, trabajadores de la refinería Bío Bío de la petrolera estatal ENAP, ubicada en las cercanías de Concepción, dijeron a Reuters que tampoco sufrió daños y sólo se activaron brevemente algunos mecanismos de emergencia.
La refinería fue duramente golpeada por el terremoto de febrero 2010, que la mantuvo por meses fuera de funcionamiento.